Comunicado

Miembros de ETA- Batasuna nos denuncian por decirles lo que son: ¡asesinos y terroristas! Tras nuestra visita del pasado martes a Guernica, donde se celebraba un juicio contra tres militares.

Vizcaya, 11 de noviembre de 2007.

Cada vez parece mas evidente que a los terroristas de eta, batasuna, y todo su entorno, no les gusta nada, pero nada de nada, que los falangistas nos paseemos por las calles de Vascongadas sin miedo alguno y que además, les digamos a la cara, lo que la mayoría de éstos demócratas del PP o del PSOE no se atreven ni a pensar.


Tras nuestra visita del pasado martes a Guernica, donde se celebraba un juicio contra tres militares acusados de desórdenes públicos por una denuncia interpuesta por miembros de eta-batasuna, no se les ha ocurrido otra cosa a éstos cobardes, amigos de los terroristas, que denunciar a los camaradas que se encontraban en el Juzgado, por llamarles "asesinos" y "terroristas".


Y es que una vez finalizada la vista, que se celebró a puerta cerrada, los falangistas que allí estaban, hicieron frente al grupo de separatistas que les increpaba dentro del hall de entrada, entre los que se encontraba alguno de los abogados que más se caracteriza en la defensa de terroristas de eta.


Tras la intervención de la Policía Autónoma Vasca que se encontraba dentro de los Juzgados, escopeta en mano, nuestros camaradas abandonaron el lugar, no sin antes hacerles ver que ellos no escondían sus caras ni sus nombres, y que ya sabían donde encontrarles.

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Nueva denuncia por proferir amenazas de muerte en el Juzgado.

La Ertzaintza se encargó de la escolta y protección de los militares juzgados y de los ultraderechistas, quienes no tuvieron empacho alguno en lanzar nuevas amenazas de muerte dentro de la sede judicial, en este caso dirigidas contra los allegados del trabajador de la «herriko taberna» de Mungia, quienes esperaban fuera de la sala a que finalizara la vista.

Junto a Ricardo Sáenz de Ynestrillas, llegaron en el coche escoltado por la Ertzaintza el militar al que defendía, una mujer y otros dos hombres. Estos últimos ejercían de miembros de seguridad del líder ultraderechista. Esas personas también accedieron al Juzgado y, pese a que no pudieron entrar a la sala por ser el juicio a puerta cerrada, permanecieron en los pasillos. Al concluir la sesión trataron de fotografiar al denunciante, actitud que fue recrimanada por los familiares y amigos del camarero. Entonces, los acompañantes de Ynestrillas comenzaron a insultarles. Según consta en la denuncia que interpusieron por lo sucedido las personas que se encontraban allí, les llamaron «asesinos», «hijos de puta» y «terroristas», y les gritaron que les iban a matar porque tenían pistolas.

La Policía tuvo que intervenir y el procurador solicitó a los agentes que se les identificara e intervinieran los teléfonos móviles para evitar que puedan colgar las fotografías en las páginas fascistas de internet.

Al producirse los hechos denunciados en la entrada del Juzgado y al existir cámaras de seguridad en ese lugar, los allegados reclamaron también que se les entregue una copia con las imágenes para las diligencias pertinentes. M. A.

Información recogida del diario proetarra Gara.

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